El dos
es la cifra de la alteridad, la pluralidad. Uno es la soledad, el monólogo. El dos
es la alternancia, la dialéctica: el bien y el mal; luz y tinieblas; el yin y
el yang; materia y espíritu…
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Paseaba mi amigo El Coleccionista de luz por una Laguna olvidada, oculta como hiciera Avalon en su momentos primeros...y quiso captar su esencia, la vida que la Luz descubría sigilosamente.
ResponderEliminarCual sorpresa se llevó que descubrió cómo la Vida emergía con fuerza. Impactaba con sus colores en una atmósfera cálida y silenciosa.
Los colores de las flores rompían el equilibrio, color y matices templados. Pero como bien dice juntos forman la unidad. Desde la Templanza y el Silencio, La vida y el ruido de los seres vivos que en perfecta simbiosis nos dan una ejemplar clase de Naturaleza.
Gracias por descubrirnos este mágico mundo.
Carmen Carrero.