sin saber aún
si tocan el frío,
el silencio,
el miedo,
la pobreza...
he aprendido a volar entre grietas
emborrachándome de vida,
pero no he olvidado dar solidez
a mis principios
en este escenario a pie de calle
donde mi mano en equilibrio,
apela al susurro gritos
en el fondo de tanta mezquindad.